Es posible que hayas visto hermosos diseños de madera que están disponibles en forma de muebles, etc. Si es así, ¡es probable que fueran hechos con chapas! La chapa es una capa de madera tan fina como el papel que se pega sobre otro material como aglomerado o MDF. De esa manera, el mueble parece ser de madera sólida, aunque no lo es. La chapa puede producir acabados más bellos que hacen que los muebles parezcan realmente atractivos.
La chapa comienza con la recolección de madera. Una vez que se tala los árboles, su corteza, que es la capa protectora externa, se quita. Cuando se retira la corteza, los troncos se cortan en láminas finas o chapas. Se cortan con una máquina diseñada exclusivamente para ello. La fábrica recibe las chapas, que se clasifican y gradúan después de haber sido cortadas. En otros casos, las chapas de menor calidad se utilizan para productos como el contrachapado, que a su vez se emplea en muebles domésticos y construcción.
Paso 1: Las chapas crudas se remojan en agua hirviendo. El remojo hace que la madera sea más suave y fácil de trabajar. Las chapas pasan por un proceso de remojo, luego se presionan para eliminar cualquier arruga o curva y finalmente se cortan en diferentes formas con una máquina de guillotina. Esto asegura que los cortes sean limpios y precisos. Luego, el respaldo se pega a las chapas reutilizadas. ¡Increíble, verdad?! El respaldo también ayuda a reforzar y estabilizar la chapa. Bajo este pegamento, se corrige la superficie para darle una forma bonita y conveniente. En este punto, la nueva hoja de chapa está lista para ser cortada y luego utilizada en la fabricación de muebles u otros artículos como piezas decorativas y gabinetes.
Estas fábricas solo se abastecen de bosques que están bien mantenidos y gestionados de forma sostenible. De esta manera, siempre que alguien tala un árbol para convertirlo en papel, se planta otro en su lugar para que el bosque permanezca vivo. La fábrica también aprovecha fuentes de energía renovable, como la energía solar, para ayudar a mantener la contaminación y la huella de carbono en la Tierra lo más baja posible.
Los trabajadores de la fábrica son excelentes artesanos. Y realmente ponen mucho orgullo y cuidado en el proceso para asegurarse de que cada pieza sea de primera calidad. Esto significa que clasifican los trozos de madera y utilizan máquinas precisas para lograr un corte impecable en cada capa de chapa, lo que les permite hacer que su producto final luzca espectacular.
Una técnica para hacer esto se llama bookmatching. Durante este proceso, dos láminas de madera se abren como un libro y se unen en el lateral. El patrón que se crea parece un espejo y le da a la pieza de mobiliario un acabado absolutamente hermoso. Esta técnica resalta el grano y hace que cada pieza individual sea muy única.
El incrustado es otro método. "Cortar partes de madera que tienen una característica gráfica diferente e incrustar esas partes en la lámina para generar un patrón único. Aunque este es un trabajo intrincado y laborioso, ¡sin duda valdrá la pena el esfuerzo! Los diseños intrincados pueden realmente dar vida al mueble.